sábado, 1 de octubre de 2011

El pescador

- Una poesía de las que me gustan, con final feliz:
Hinchada el agua, espumajea,
mientras sentado el pescador
que algún pez muerda el anzuelo
plácido aguarda y bonachón.
De pronto la onda se rasga,
y de su seno—¡oh maravilla!—
toda mojada, una mujer
saca su grácil figurilla.
Y con voz rítmica le increpa:
—¿Por qué, valiéndote de mañas,
hombre cruel, tiras de mí
para que muera en esta playa?
¡Si tú supieras qué delicia
allá se goza bajo el agua,
tal como estas te arrojarías
al mar, dejando en paz la caña!
¿No ves al sol, no ves la luna
cómo en las ondas se recrean?
¿Doble de hermosos no parecen
cuando en las agujas se reflejan?
¿No te seduce el hondo cielo
cuando su azul, húmedo muestra?
Cuando este aljófar lo salpica,
¿del propio rostro no te prendas?
Hinchada el agua, espumajea,
del pescador lame los pies;
siente el cuitado una nostalgia,
cual si a su amada viera fiel.
Cantaba un tanto la sirena,
todo pasó en un santiamén;
tiró ella de él, resbaló el hombre,
nunca más se dejó ver.
- Feliz depende de como se mire... porque si entendemos que se va con la sirena a su mundo onírico bajo el agua... bien. Pero no es feliz si piensas que muere, ¡que es lo que en realidad pasaría!jajaja


Era un toque irónico lo mío. Sé perfectamente que muere jajaja


- Pues no estes tan seguro... es una metáfora precisamente de la evasión, de que hay mundos mejores. No siempre la muerte significa la muerte, querido amigo ;) El pobre pescador, tras escuchar las esperanzadoras palabras de la sirena, sólo quería huir de su realidad.


- Y creo que acabó en el fondo del mar :)
Las sirenas son muy malas


- Bah, tonterias. Yo las conozco y son buena gente =D

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
 No siempre la muerte significa morir ni la vida implica vivirla... En medio estamos los muertos en vida

No hay comentarios:

Publicar un comentario