viernes, 24 de agosto de 2012

Elogio de la sombra.

La vejez (tal es el nombre que los otros le dan)
puede ser el tiempo de nuestra dicha.
El animal ha muerto o casi ha muerto.
Quedan el hombre y su alma.
Vivo entre formas luminosas y vagas
que no son aún la tiniebla.
Buenos Aires,
que antes se desgarraba en arrabales
hacia la llanura incesante,
ha vuelto a ser la Recoleta, el Retiro,
las borrosas calles del Once
y las precarias casas viejas
que aún llamamos el Sur.
Siempre en mi vida fueron demasiadas las cosas;
Demócrito de Abdera se arrancó los ojos para pensar;
el tiempo ha sido mi Demócrito.
Esta penumbra es lenta y no duele;
fluye por un manso declive
y se parece a la eternidad.
Mis amigos no tienen cara,
las mujeres son lo que fueron hace ya tantos años,
las esquinas pueden ser otras,
no hay letras en las páginas de los libros.
Todo esto debería atemorizarme,
pero es una dulzura, un regreso.
De las generaciones de los textos que hay en la tierra
sólo habré leído unos pocos,
los que sigo leyendo en la memoria,
leyendo y transformando.
Del Sur, del Este, del Oeste, del Norte,
convergen los caminos que me han traído
a mi secreto centro.
Esos caminos fueron ecos y pasos,
mujeres, hombres, agonías, resurrecciones,
días y noches,
entresueños y sueños,
cada ínfimo instante del ayer
y de los ayeres del mundo,
la firme espada del danés y la luna del persa,
los actos de los muertos,
el compartido amor, las palabras,
Emerson y la nieve y tantas cosas.
Ahora puedo olvidarlas. Llego a mi centro,
a mi álgebra y mi clave,
a mi espejo.
Pronto sabré quién soy.

Jorge Luis Borges


martes, 21 de agosto de 2012

Lista de los 21 - Remake

Visto que las cosas han tomado un rumbo inesperado, lo cual no me desagrada, me veo fuera de lugar de la lista anteriormente publicada. Los cambios no son ni buenos ni malos, simplemente son. Y está bien que estos cambios me hagan quedar algo lejos de lo que era antes, porque eso significa que evoluciono. Aunque aún hay cosas que quisiera realizar de aquella primitiva lista que no he podido o que han pasado a segundo plano, han sucedido otras cosas inesperadas que valoro como importantes.
Podría suponer que cambiar cosas a tres días de mi cumpleaños estas alturas es como hacer trampas... pero en realidad la intención de la lista es echar una ojeada a esas cosas que han ocurrido en el tiempo de un año, esos detalles que han supuesto que el tiempo no pase en balde, con su aprovechamiento más o menos intenso... pero aprovechamiento al fin y al cabo. Y como mi lista es mia y la cambio cuando quiero, pues creo que no necesito dar más explicaciones. Ahí va:

Lista de los 21 - lo que ha acabado siendo

1. Bailar un solo improvisado.
Lo de improvisado ha sido un plus de reto, así que ha supuesto un cambio significativo respecto a lo que hice el año pasado. Por tanto, un avance.

2. Subir otro vídeo bailando a youtube. 
Fue del estilo del que tenía grabado en el salón. He podido ver mejoras en la precisión de los movimientos y la creatividad.

3. Publicar un microrrelato en un libro físico.
Gracias a un concurso de ArtGerust y su selección de los 200 para la antología. Mi primera publicación :D

4. Conducir un coche por primera vez. 
Pensaba que me quedaría muy lejos, o que sería desastroso, pero en contra de lo que ocurre cuando intento coger un vehículo de dos ruedas, con este me fue bastante mejor! Si es que si se explican las cosas bien, así sí.

5. Empezar a escribir un cuento largo/novela corta.
Esto es verdad, escribo menos de lo que me gustaría, pero me libro de prejuicios y escribo. Ya cuando tenga algo lo revisaré y editaré cosas, pero de momento dejo que fluya todo como salga y a ver qué pasa.

6. 22/30 entradas en el blog.
Este logro no lo he conseguido... Si me hubiera esforzado un poco más estaba ahí ahí... pero bueno, supongo que si no tengo cosas que decir o no sé cómo expresarlo, escribir por escribir no me supone nada.

7. Hacer pulseras de chapas y gorros de muñecas con ganchillo.
Este punto trataba sobre manualidades. Hice gorros para un taller de muñecas que hizo mi madre en la tienda y las pulseras de anillas de refresco, que aún sigo en ello así que si os acordáis de guardarme algunas... bienvenidas sean.

8. Aprender a usar los crótalos.
Conseguido en el taller intensivo de mi profe este año. La verdad es que ya tenía ganas, ahora a practicar lo más silenciosamente que pueda por el bien de los vecinos xD.

9. Ir a un festival de música.
Este año ha sido mi primer Viña Rock. A pesar del mal tiempo y el frío horrible fue una experiencia chula, descubrí algunos grupos interesantes, y bailé en otros que no eran tanto de mi estilo, pero su energía se contagiaba enormemente.

10. Hacer una escapadilla veraniega.
Lo llevaba buscando desde hace tiempo, me hacía ilusión poder pasar un par de días de relax fuera de casa con Agus olvidándome de examenes y esas cosas. Y con coche nuevo :O

11. Aprender a montar en bici.
Bueno... Arrancar es mi asignatura pendiente, mi equilibrio es pésimo en los vehículos de dos ruedas, no hago simbiosis y me equilibro yo pero no enderezo la bici. Aún así, ya arrancada logré hacerme el parquezuelo alargado de arriba del hospital todo lo largo que es. ¿Cuenta entonces como un semilogro?

12. Aprender un poco de C++.
Esto también surgió improvisadamente. Y le he encontrado utilidad a mis pequeños conocimientos y me he hecho un programita que resuelve ecuaciones de segundo grado. En técnicas analíticas me es muy útil, y si hay algo tedioso en el mundo, eso es aplicar la fórmula de las ecuaciones de segundo grado con números muy grandes, muy pequeños y con exponentes. De todo hay que aprender en esta vida.

13. Aprender Esperanto.
Mi curiosidad llega hasta límites insospechados. Puede que parezca que no tenga futuro ninguno, pero hay gente que aprende élfico, pues yo aprendo esperanto, quizás algún día me sea útil. Y es interesante ver las influencias de otros idiomas que tiene y comparar con el español, italiano, inglés, alemán... Es entretenido.

14. Cantar en un grupo.
Tampoco era algo planeado pero sí que ha sido significativo. Ya van dos veces, y ha sido medianamente decente, así que estoy contenta con ello :)

15. Mantener mi promesa de control sobre el malsano hábito de beber.
La verdad es que por el estilo de vida que llevo ahora ya casi no bebo apenas, quizás una cerveza muy de vez en cuando (cada dos semanas o así). Mi cerebro me lo agradecerá xD.

16. Mejorar mi estado físico (elasticidad y forma en general).
Esto es difícil de cuantificar... pero en general sí que he notado que en los últimos meses de clases de tribal me cuesta menos hacer las series de 20 abdominales, alcanzo más ángulo de apertura de piernas, me mantengo con la espalda erguida y me inclino hacia delante con menos esfuerzo. Yo creo que está conseguido.

17. Hacer algún plato de cocina chulo.
Eso de chulo es muy ambiguo, pero lo más destacado han sido una coca boba y fajitas, que las he comido, pero nunca las había hecho desde cero. Mención especial a mi pinche de cocina que ha colaborado también en ambas tareas :P

18. Subir Serra Gelada.
Bueno, tenía puesto subir una montaña o hacer senderismo a secas, pero resultó ser una sierra entera U_u. Ahora que ha pasado algo de tiempo pienso que lo repetiría, pero es como lo que nos pasa a las mujeres con los tacones, que al tiempo piensas: Si no sería para tanto... Y acabas diciéndote que no volverás a hacerlo.

19. Veinte libros leídos.
Me puse de meta 17, y hasta la fecha llevo 20. Éxito :)

20. El "jiji-jajá".
Es algo destacado, totalmente imprevisto y que tampoco pensé que alguna vez lo haría... Ea, ahí queda xD

21. Bonus por la sorprendente improvisación de muchos de los puntos.
Aunque este bonus no va exactamente para mí, puesto que muchas cosas no han sido planeadas. Me gusta que sucedan las cosas por sorpresa. Está bien :D

viernes, 3 de agosto de 2012

Te matan antes de muerto.

Iba caminando en dirección a casa cierta tarde de verano después de una purificadora clase de danza. Como es de esperar en los trayectos desde la academia hasta casa, no suelo fijarme mucho en las cosas que me rodean, sino que percibo detalles sensoriales distintos de los visuales pues estos, maquinalmente, están controlando el tráfico, los semáforos y los caminos más cortos y más rápidos hacia casa.

Sucedió que me llamó la atención un olor... Tras clasificarlo en mi cabeza casi automáticamente como olor a muerte, mi atención se concentró en explorar el estímulo percibido, tan poco común. Indago en la asociación con la idea de la muerte, y descubro que el olor tiene un parecido asombroso con el formol, y automáticamente lo comparo con éste (pues el olor del formol tiene la "cualidad" de incrustarse en las fosas nasales y ser muy característico). Busco a mi alrededor con la vista, y me percato de una anciana que caminaba del brazo de una mujer de mediana edad justo delante mía, y la hipótesis de que el olor sea en realidad el perfume de la anciana me sorprende y aterra.

No concibo a imaginar qué clase de persona descerebrada podría crear un perfume con olor a disolventes clorados que tira para atrás y que serviría para ahuyentar a todos los mosquitos en 1 kilómetro a la redonda. O qué clase de persona podría comprarse y usar voluntariamente tal sustancia. Y también me pregunto si la mujer de al lado no está también hasta las narices (literalmente) del discreto olorcito.

Quizás fuera un suero, pomada, crema, desinfectante o vete tú a saber. O podría ser formol de verdad y resulta que la quieren conservar... De una manera muy tóxica, por cierto. Pero a mí lo único que me parece es que aquí, en cuanto incordias, ya te ponen una patita en el ataúd. Te dan por muerto antes de que lo estés. Te quitan de en medio.
Te recuerdan diariamente y con olores, colores y estertores de muerte que eres viejo, y que tu fin se acerca... y que a ver si llega pronto que lo único que haces es incordiar.

Te matan antes de que lo hagas por ti mismo. Por ahorrarte el esfuerzo, vaya.